TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN SOCIAL
Acerca de mí
- Iraís Méndez Briones
- ¡Hola a todos! Les doy la más cordial bienvenida a este sitio, deseando que este intercambio propicie un aprendizaje a través del análisis teórico y aplicación práctica
viernes, 28 de junio de 2013
martes, 25 de junio de 2013
a. ¿QUÉ ES UNA TÉCNICA?
Técnica es el conjunto de mecanismos, medios y
sistemas de dirigir, recolectar, conservar, reelaborar y transmitir los datos.
En
el entendido de que se considera a la técnica como la manera de recorrer el
camino que propone el método de una forma práctica, reflexiva y constante. Si
en Trabajo Social existen los métodos tradicionales como el caso, grupo y el
trabajo comunitario y para cada método
existen técnicas especiales o particulares para llevarlos a la práctica, luego
entonces encontramos que se manejan en Trabajo Social algunas técnicas específicas.
b. La observación
Es evidente que en
nuestra vida cotidiana la observación es, por decirlo de algún modo, el
procedimiento que utilizamos ordinariamente para adquirir conocimientos.
Continuamente observamos, pero rara vez lo hacemos metódicamente (para no decir
“científicamente”, que puede resultar una expresión un tanto ampulosa).
Observar es, un quehacer del vivir.
Sin
una diferencia de naturaleza, aunque si de intencionalidad y forma, se ha ido
desarrollando la técnica de observación como un instrumento para la
recopilación de datos e información.
Para
explicar esta técnica consideraremos las siguientes cuestiones.
Técnica
antigua y moderna de recopilación de datos.
Se
ha dicho – y con razón – que la observación es el procedimiento empírico por
excelencia, el mas primitivo y a la vez el más moderno. En efecto, éste fue el
procedimiento utilizado por Aristóteles para recoger buena parte de la
información que nos proporciona en su libro La Política. Además lo postula como
método de estudio de los fenómenos concreto, aunque no lo llame así: “debe
concederse –decía- más confianza a la sensación que al razonamiento y fiarse de
las consideraciones racionales mientras éstas faciliten resultados en
concordancia con los fenómenos”... Más cerca de nosotros la obra de Alexis de
Tocqueville, La democracia en América, nos revela los resultados de un estudio
sociológico y político realizado a través de la observación atenta y perspicaz
de la realidad norteamericana.
Desde
fines del siglo pasado y comienzos de éste, se fue recurriendo a esta técnica
de una manera cada vez mas sistemática, llegando a construir el instrumento
metodológico por excelencia de la antropología (ya se la adjetive como social o
cultural, según el modo inglés o norteamericano de designarla). Entre los años
1859 y 1862, en los estudios que Morgan lleva a cabo en las tribus situadas en
Kansas y Nebraska, realiza observaciones (como técnica de estudio) al estilo de
los antropólogos modernos. Con Tylor la disciplina adquiere perfiles propios,
pero es con Bronislaw Malinowski con quien se sistematiza y fundamenta en sus primeras formulaciones la
técnica de observación. El la utiliza ampliamente en sus investigaciones en las
islas del Pacífico y sus resultados están contenidos en el libro “Los
argonautas del Pacífico Occidental”, hoy uno de los clásicos de la
antropología.
Si
bien es cierto que como procedimiento de recolección de datos y de información
se la ha considerado como el más propio y específico de la antropología, se ha
de reconocer que su uso hoy es mucho más amplio. En los últimos cuarenta años
han aparecido numerosos trabajos de investigación realizadas mediante la
técnica de la observación participante. El ejemplo clásico es el estudio que
realizaron Robert y Helen Lynd (“Midletown: a study in comtemporany american
culture”, New York, 1929; “Middletown in transition: a study in cultural
conflicts”, New York, 1937) con un grupo de colaboradores, residiendo varios meses
en la ciudad que era objeto de su estudio, participando de su vida (asambleas,
reuniones, comidas, fiestas, conferencias, etc.) y asumiendo las
responsabilidades de cualquier ciudadano.
Similar
es el procedimiento empleado por Lloyd Warner, bajo cuya dirección se comenzó a
estudiar en 1930 una ciudad típica de 17000 habitantes, trabajo que se concluyó
sobre el terreno en el año 1937. el equipo se presentó como un grupo de la
escuela Superior de Comercio de la Universidad de Harvard, lo cual le permitió
tener amplia aceptación por parte de la comunidad local en atención al
prestigio de la entidad patrocinante. La elaboración de los datos recogidos
duró alrededor de veinte años y entre 1941 y 1949 se publicaron los resultados
en varios volúmenes (Yankee City Series, 1941/49), reconociéndose como los
aportes más importantes de la obra los referentes a la estratificación social y
a la clasificación de las clases sociales.
La observación como técnica
de investigación social
Un
alcance similar le da Pardinas; bajo la denominación de “tipos y técnicas de
observación científica de la realidad”, designa la observación de fenómenos
sociales, la observación heurística, la observación para comprobación o
disposición de hipótesis, observación documental, observación monumental y
observación de conductas.
Otros
autores –entre los que nos incluimos- hacemos referencia a la observación como
una de las técnicas de recopilación de datos y de captación de la realidad
socio-cultural de una comunidad o de un grupo social determinado. En este caso,
el término se utiliza en el sentido más corriente: una o más personas observan
lo que ocurre en una situación y registran lo que acontece. Con este alcance,
que es el que le damos en el libro, la observación se entiende en sentido
estricto, como observación directa.
Para
quienes se inician en el estudio de los métodos y técnicas de investigación
social es importante tener en cuenta los diferentes alcances con que se utiliza
el término para no incluir en confusiones en cuanto al significado de la
palabra.
i. Características de la observación
INSTRUCCIONES: Lee y comenta la siguiente información, considerando si estas características están presentes en las prácticas de observación de campo que has realizado
Según
Sierra Bravo pueden distinguirse las siguientes:
· “Ser
un procedimiento de recogida de datos que se basan en lo percibido por los
propios sentido del investigador. Con ello se diferencia de la investigación
documental y por cuestionario y entrevista, que se fundan en las percepciones
contadas de palabra o por escrito.
· Consistir
en el estudio de fenómenos existentes naturalmente o producidos espontáneamente
y no provocados artificialmente como en los experimentos puros.
· Ser
un examen de fenómenos o acontecimientos actuales tal como son o tienen lugar
en la realidad del momento presente y no sobre hechos o acontecimientos
pasados.
· Que
se realice con fines sociológicos, y con arreglo a los requisitos exigidos por
la investigación, sociología científica, según su naturaleza descriptiva o
explicativa. Esta condición distingue la observación sociológica de la
realizada con otros fines, incluso científicos, no sociológicos”.
ii. Modalidades de la observación
Según
sean los medios utilizados para la sistematización de lo observado, el grado de
participación del observador, el número de observadores y el lugar donde se
realiza, la observación puede adoptar diferentes modalidades:
Según
los medios utilizados:
-observación
no estructurada
-observación
estructurada
Según
el papel o modo de la participación del observador:
-observación
no participante
-observación
participante
Según
el número de observadores:
-observación
individual
-observación
en equipo
Según
el lugar donde se realiza:
-observación
efectuada en la vida real (trabajo de campo)
-observación
efectuada en laboratorio
iii. Normas de la observación
INDICACIONES: En tus prácticas has realizado diversas acciones que te aportan información a tu investigación. Una de ellas es la observación.
Te pido ubiques dicho trabajo y, leas la siguiente información. Elabora una lista de cotejo donde puedas definir cuales de estas normas recordaste aplicar durante el uso de esa técnica de investigación.
Para
que una observación –en cuanto procedimiento de recogida de datos- tenga
validez científica, no puede reducirse a un simple mirar las cosas ni a una
vulgar y corriente comprobación de lo que sucede.
Ciertamente,
el observador es el principal factor o elemento. Digámoslo como un pleonasmo: debe tener capacidad de observar. Ahora bien, ¿qué precauciones se
han de tomar para mejorar la capacidad de observación, o bien, para garantizar,
en la medida de lo posibles, la validez de las observaciones?, ¿qué sugerencias
prácticas se pueden hacer en un curso o libro de iniciación a las técnicas de investigación
social para desarrollar dicha capacidad?... Uno de los principales problemas de
esta técnica es el peso de la ecuación personal del observador, por lo tanto
reviste gran importancia todo aquello que ayude a aumentar la validez y
confiabilidad del observador, no en el sentido ético sino técnico-científico.
No
hay por qué suponer que la capacidad de observar es innata. La experiencia
acumulada acerca de la práctica de esta técnica nos muestra la necesidad de
tomar ciertas precauciones y tener en cuenta algunas normas prácticas para
realizar una observación sistemática y controlada. Éstas son:
a.
Utilizar
la observación con un objeto bien determinado
dentro del proceso de la investigación a realizar. Antes de iniciar el trabajo
sobre el terreno es necesario haber establecido el qué y para qué de la
observación como un aspecto de qué y para qué de la investigación.
b.
Necesidad
de explicitar el nuevo marco teórico referencial que
servirá para orientar la realización de las observaciones sobre el terreno:
ningún investigador social o trabajador social que esté realizando una
investigación va al campo como una “tabla rasa” en la cual se van anotando las
observaciones de una manera mas o menos mecánica. Advertimos que esta
orientación o marco teórico no siempre ayuda a la observación; no es extraño
que muchos se esfuercen por “introducir” la realidad en sus esquemas o no vean
más allá que los conceptos o categorías de su ciencia, lo cual termina por
interponerse entre el observador y la realidad.
c.
De
acuerdo con lo anterior, es necesario tener una lista de guía o control acerca
de los aspectos que se pretenden investigar, aunque ésta será siempre una lista
abierta en todas direcciones pues, una vez en el terreno aparecen elementos
que no se habían previsto inicialmente.
Esta guía de observación será muy variable según el grado de estructuración de
la investigación; en los estudios exploratorios es necesario que la guía sea
más flexible.
d.
Determinar
los instrumentos a utilizar para el registro de informaciones y datos (estos
medios podrán variar o ajustarse una vez en el terreno).
e.
Resolver
los problemas prácticos, tales como traslado al
lugar, alojamiento, elementos que se deben llevar, material de trabajo, etc.
f.
Realizar
el trabajo de manera responsable y sistemática; si
las tareas de observación se toman como un formulismo, o se hacen de manera
fragmentaria y rutinaria, se resta validez a los resultados. El trabajo de
observación exige un cierto nivel de tensión vital y de energía para estar
atento a la observación y para crear y mantener las interacciones sociales que
exige el trabajo de campo.
g.
Como
actitud fundamental se necesita de una “comprensión simpática” para entender
debidamente a otras persona, sentimientos, reacciones,
emociones o experiencias intelectuales o religiosas que la investigador social
no ha experimentado o sentido. Es evidente que un espíritu sensible, un caudal
de amplia simpatía y un sentimiento de fraternidad humana, unidos a la
dimensión y variedad de la experiencia, forman parte de un buen observador.
h.
El
observador procurará incorporarse sin llamar la atención, con
una manera natural de actuar, evitando suspicacias y actitudes de superioridad;
ha de respetar, asimismo, las convenciones sociales del grupo o comunidad con
la que ha de trabajar.
i.
Ya en el terreno, habrá que buscar a algunas personas claves
que serán como “puentes” o “introductores” hacia el resto del grupo o
comunidad.
j.
Cuando
sea necesario se dará a la gente una explicación de las tareas que se van a
realizar.
k.
Se ha desarrollar la capacidad de utilizar indicios y percepciones, a
partir de “pequeños detalles”; como no se puede observar “todo”, es importante
registrar las “impresiones múltiples” obtenidas por el investigadores de campo
en sus observaciones, especialmente para que sus interpretaciones sean
pertinentes. Cada una de estas “impresiones”, leves, imparciales, imprecisas,
ayudan a la comprensión del “todo”.
l.
Las
observaciones se deben poner por escrito lo antes posible, ya
que no siempre se pueden tomar las notas en el momento.
m. Por último, una aspecto importante en el uso de
la observación, conforma la realizan los antropológicos, es el de asegurar los medios de control para la
validez y fiabilidad de los datos registrados.
c. La entrevista
INSTRUCCIONES: Lee la siguiente información, investiga el tema y complementa en comentarios, aquello que consideran relevante para poder conocer este tema y que no se tiene contemplado en este texto.
La
entrevista consiste en una conversación entre dos personas por lo menos, en la
cual es el entrevistador y otro u otros son los entrevistados; estas personas
dialogan con arreglo a ciertos esquemas o pautas acerca de un problema o
cuestión determinada, teniendo un propósito profesional. Presupone, pues, la
existencia de personas y la posibilidad de interacción verbal dentro de un
proceso de acción recíproca. Como técnica de recopilación va desde la
interrogación standarizada hasta la conversación libre; en ambos casos se
recurre a una “guía” o “pauta” que puede ser un formulario o un esquema de
cuestiones que han de orientar la conversación.
Conforme
el propósito profesional con que se utiliza la entrevista, está puede cumplir
con algunas de estas funciones:
-Obtener
información de individuos o grupos.
-Facilitar
información
-Influir
sobre ciertos aspectos de la conducta (opciones, sentimientos, comportamiento)
o ejercer un efecto terapéutico.
Es
posible que en una entrevista se persiga mas de un propósito, pero de ordinario
predomina uno de ellos, de acuerdo a la finalidad profesional de la misma.
Según
la opinión de Beatrice Webb, la entrevista constituye el instrumento por
excelencia de la investigación sociológica: compensa la falta de tubo de ensayo
del químico o el microscopio del bacteriólogo. Si bien no compartimos esta
opinión, ha de reconocerse que una parte del desarrollo de las ciencias
sociales en las últimas décadas se ha logrado gracias a este procedimiento. Sin
embargo, hoy se plantean algunos interrogantes acerca de las limitaciones de
esta técnica, especialmente en los que se refiere a su uso en países del Tercer
Mundo y en cierta situaciones de marginalidad, aun dentro de los países
industrializados.
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